sábado, 28 de diciembre de 2013

Un Viaje - 277

He viajado muchas veces, a variados lugares, siempre por motivos laborales.
Así que normalmente disfruté del viaje en sí, de lo novedoso del paisaje, pero la estadía nunca fue por entero de mi agrado.
Siempre corriendo, apremiado por el tiempo, tengo pocos recuerdos positivos de mis viajes.
Lo que siempre fue una constante era  mi deseo de volver.
Me molestaba estar lejos de la familia, todo el tiempo con personas desconocidas que se comunicaban conmigo siempre con la dificultad del idioma diferente.
En esos días de mi vida no disfrutaba conociendo gente.
Si hoy emprendiese un viaje, sería más difícil para mí, volver.

Tu viaje.

He viajado por tus lejanos lugares.
Me has llevado en tu corazón y te quedaste en mi.
Has tenido encuentros y reencuentros, con gentes, con cosas y lugares.
Mi imagen seguro es etérea en esos instantes, pero la tuya está aquí...
Firme en mi corazón que no vacila, que late por ti.
Sé que voy contigo por esos recuerdos nuevos y viejos.
Mi mano estrecha a la tuya con confianza, a lo lejos, esperando.
Ya no me duele no hablarte, y a cambio siento que he quedado en suspenso.
Veo como ocurren las cosas en mi vida como si otra persona fuese.
Vuelo de mi vida a la tuya y nada acontece. Estás lejos.
Mi almanaque dice que los días pasan, insensibles, y no lo parece.
Siento que estoy conteniendo el aliento...
No estoy mal, estoy descolocado, desconectado de la realidad.
Tal vez me falte un soplido mágico de tu aire.
Cada tarea que realizo sale con un poco de ausencia en ella.
Cada día duermo sin sueños profundos, inquieto,
Queriendo despertarme, para que el tiempo pase.
Saber estar solo es algo que aprendí hace mucho tiempo.
Pero también aprendí a disfrutarte.
Y puestos en la balanza de mi preferencia,
Verás que a tu favor se inclina, como para besarte.


Nos leemos :)

domingo, 15 de diciembre de 2013

Desnudar con la mente - 278

Vocabulario sicológico.
Encontré dos palabras que no conocía. No se si son nuevas o no, pero aquí las escribo:

- Gymnophoria
- Apodyopsis

Enseguida los que conozcan las palabras pensarán ¿En qué andará Ale para meterse con estos términos?
Pero es bien simple y no fue más que coincidencia el encontrarlas.

La primera, gymnophoria, nombra la sensación de estar siendo desvestido con la mirada.
La segunda, apodyopsis, nombra la acción de desvestir mentalmente a una persona.

Sospecho, que no tienen equivalente por ahora en castellano, así que no cometeré delito al usarlas tal cual están escritas. Téngase al menos en cuenta que en inglés la combinación de la "p" con la "h" dan un sonido de "f" en castellano.

Estas definiciones me hicieron recordar en particular un verano cuando yo estaba comenzando a salir con la mujer que hoy es mi esposa.
En un día bastante caluroso me vestí con un traje de baño que tenía, un "short" como acostumbramos llamarle, y una camisa deportiva. Nada extraño, era ropa que venía usando desde hacía tiempo y en aquellos momentos pesaba siempre 74 Kg, lo que para mis 1.8 m de altura, quería decir que estaba medianamente delgado. A pesar de ir de la mando de mi compañera caminando, por la calle, noté que una niña me había mirado de forma muy poco infantil. Esta experiencia de gymnophoria, no me pareció importante, pero no fui el único que notó la mirada y ya en casa mi compañera me dice: ¿No viste? ¡A esa niña casi se le saltan los ojos de las órbitas! ¡No uses más ese short, te queda muy justo!
A lo que respondí con mi usual cabeza dura: No te preocupes, es una niña, yo también miraba a las mujeres cuando era pequeño y me imagino que no sabía disimular...

El diferendo quedó en esas palabras, pero nunca más encontré mi short. En su lugar me "regalaron" un short más amplio... Me sentí abusado y protesté, pero el hecho era irreversible, ya que mi querido short se fue junto con la basura.

Recordé entonces la enseñanza de un maestro:
-Deja caer esa copa (dice a su alumno que sostiene una copa de cristal en la mano)
El alumno acata la orden y la copa cae y se rompe.
Levanta ahora los pedazos y repara la copa.
- No es fácil maestro, esta fina copa al repararse mostrará las señales de haberse roto y no quedará bien.
- Exactamente. La copa es como la confianza. Una vez que se rompe se puede reparar, pero nunca será la misma...

La vida está llena de pequeños actos diarios, alguno de los que como el ejemplificado, no deben resolverse de forma unilateral, por que no dejan mas que recuerdos negativos.

En definitiva parece muy evidente que la gymnophoria puede llegar a ser más que una "sensación" cuando dos personas la pueden percibir al mismo tiempo.
En cambio la apodyopsis es otro cantar. Ya el hecho de que la persona sea desnudada mentalmente, indica que puede no haber señales externas de la ocurrencia del acto mental.
En el ejemplo que he dado, si en lugar de una niña hubiese sido una mujer adulta la que quedase impresionada (situación que ya es de más difícil ocurrencia), seguramente la señora hubiese hecho su apodyopsis sin que yo me enterase por ir acompañado, salvo que yo fuese caminando solo y en ese caso la señora decidiera mostrarme su sentimiento, con una finalidad ya bastante más decidida a provocar una reacción mía.

Es la apodyopsis entonces la responsable de todo.

¿Qué indica esta forma de pensar? Solo se trata de una consecuencia de la atracción sexual. Ves a una persona que es sexualmente atractiva y puede ocurrir que tu mente se dispare y le desnudes mentalmente.
No todas las personas reaccionan igual. A mi me ocurre, pero solamente en situaciones muy sugestivas o con alguna persona en particular que me gusta. Pero se que hay gente que lo tiene casi como una rutina: ven un ejemplar desconocido del sexo de su gusto y le aplican el procedimiento mental como un ritual generador de la primera impresión. Es lo que se llama vulgarmente hacer un "fichaje" por que la conducta reiterativa en este aspecto genera un fichero de datos de la gente que se va desnudando, quiero decir, conociendo, jeje.

No cometeré el sacrilegio de decir que una u otra conducta son enfermizas, (aunque el fichaje parece serlo) por que lo que es realmente enfermizo es negar el sexo como elemento de la conducta humana. Los humanos somos animales sexuados.

Quizá sí, en los casos extremos, esta conducta mental sea molesta, pues genera una distracción muy importante del foco de atención. No me gustaría que el chofer del taxi en que viajo tuviese esta costumbre, por ejemplo.


Te espero para salir esta noche.
No se por qué llegué temprano,
Para luego salir tarde...
Solo lo compensa salir junto a ti :)

Apareces corriendo para decirme:
Vamos, que se hace tarde!
Pero me quedo petrificado al verte,
No pareces la misma persona de siempre.

Me das un beso queriendo despertarme.
De un sueño o de qué me despiertas?
Es que mi mente comenzó a divagar,
A pensarte en otro lugar y otro instante.

Ya en ese otro lugar, sin apuros,
Te abrazaría para darte un beso apasionado.
Mis manos extasiadas quitarían tu ropa
para explorar toda tu geometría encantadora...

Pero mi mente fue muy veloz,
Mis manos están penadas e impedidas.
Mi pequeño sueño se esfuma,
Es que estamos apurados, y nos vamos.



Nos leemos :)

domingo, 8 de diciembre de 2013

El Hechizo - 279


La pradera infinita alberga todo.
Todo tiene su propio Manitu, su propio espíritu, que se conecta en el Gran Manitu, el equilibrio de la vida, de la naturaleza.

Cuando el Bisonte se aleja, nosotros levantamos el campamento y viajamos hasta otro lugar propicio en la pradera.
Es el momento de la gran decisión para los más ancianos. Seguir a la tribu y hacer mas difícil el camino o quedarse a enfrentar el destino.

Ya habían pasado dos lunas desde el anterior asentamiento de nuestra vida nómade, y tenía desde hace mucho tiempo en mi pecho la duda acerca de la suerte que hubiese corrido mi gran amigo, el joven Viento Del Mar. Siempre fue muy obstinado y decidió quedarse junto a su abuela para cuidarla mientras todos nos fuimos. Se negó a obedecer al concejo y dejar a su abuela con otros ancianos que se quedaban en ese lugar. Es que su madre murió poco después que él naciera y su abuela tomó su lugar, así que los lazos que les unían eran muy fuertes.

Fui entonces a hablar con Gran Halcón, el Chamán mas poderoso de su tribu.
- ¿Podré saber alguna vez que ocurrió con mi gran amigo de la infancia?
- Ven a mi tipi cuando caiga el sol, en la noche sin luna. Ven solo.

Se hizo larga la espera, pero al fin en la noche sin luna me presenté ante el gran sabio.
Su tipi estaba un poco mas apartado de los demás y él estaba afuera sentado, fumando su pipa.
- ¿Me recuerdas?
- Te estoy esperando, dijo con su expresión seria de costumbre.

En el centro del amplio tipi había un pequeño fuego ardiendo, y una fina columna de humo subía junto al resplandor de luz hasta la salida en la parte superior.
Avivó el fuego pasando su mando por encima, con esa magia que todos admiran.
- Siéntate aquí, sobre esta manta.
Me ofrece a beber una taza con un líquido humeante. Amargo y tibio. Enseguida pronuncia unas plegarias muy suave y alza las manos con más plegarias, moviendo sus amuletos de plumas. Me quedo mirando sus manos y además las chispas que van subiendo con el humo. Ya no escucho su voz y mis ojos se van cerrando sin que tenga sueño. Puedo verme mientras Gran Halcón toma la taza de mi mano, con su otra mano me recuesta en la manta y luego estira mis piernas. Su danza continúa junto a mi cuerpo, pero yo me voy con el humo.

Puedo ver la aldea y sus fuegos como se van quedando pequeños en la lejanía. Parece que el gran espíritu me subió a un pájaro muy veloz, pero no estoy viajando hacia donde debe estar mi gran amigo. Viajo para arriba. Y llega el momento que las nubes no me dejan ver.

No se si me quedé dormido, pero estoy despertando y el sol está muy fuerte... ¿el sol? no, no es el sol, debe ser algún reflejo, por que viene de dos lugares diferentes...
Mis ojos se niegan a ver bien, y estoy en un lugar distinto a los que conozco, sin cielo, pero muy resplandeciente. Se acerca una mujer, pero no puede ser, es muy extraña y toma mi mano... ¿Esa es mi mano? ¡He perdido el color y parece la piel de un muerto! Aún no sale el sonido de mis labios.

- ¡Ven a ver ésto Susana! dice la señora en una lengua que no es la mía, pero que no sé cómo comprendo.
Se acerca la doctora, una señora mayor de piel bastante oscura, y dice:
- Pues ya estaba hablando con los deudos... y su corazón late muy bien, ¿Qué está ocurriendo?...
Después de revisarme un largo rato, se va la doctora y llega con una señora bastante anciana, que trae una sonrisa en sus labios.

- ¡Estás aquí Alberto! y no se por qué, mis labios también fueron reflejo de aquella sonrisa.
Era una señora muy mayor, como la abuela de Viento Del Mar. Besó repetidas veces mi rostro pero sentí que mi piel no era la misma. Tengo mucho dolor en todas partes, pero soy feliz... ¿Qué es ésto? ¿Qué me ocurre?
Ahora es el sueño el que cierra mis ojos.

Un dolor en el costado me despierta y veo que de alguna parte viene luz, pero al menos en la ventana está la luna... ¿Cómo que está allí, si yo vine una noche sin luna? Puedo ver al costado del lugar donde estoy, a la señora que está dormida, con su mano cerca de la mía. La tomo no se por qué y ella responde igual, sin despertar. Esto me hace sentir bien a pesar de todos los dolores que siento. ¿Podré ponerme de pié?
Con cuidado suelto la mano de Annette para que no despierte. ¿Annette? ¡Qué extraños son los nombres en este sitio!... Hago un descomunal esfuerzo y mis piernas se mueven, pero todo me empieza a dar vueltas y ahora todo duele mucho más, así que me quedo quieto a ver si esto mejora.
Hagamos otra prueba. Intento incorporar mi cuerpo... Parece pesar enormemente y siento el corazón como a punto de saltar de mi pecho. Estoy sentado en esa penumbra lunar y veo que hay varios cordones pegados a mi que van hacia atrás. Parece que me ataran así que los saco todos, aunque algunos duelen al salir. Empiezo a sentir que me falta el aire y mi corazón se acelera cada vez más. Un sonido extraño surge desde atrás y vienen corriendo a mi encuentro varias personas. Me recuestan con gentileza y piden que salga del cuarto a Annette, pero yo digo que no moviendo mi cabeza y parecen entender. Ella se queda, pero se aparta, como todos menos el hombre de los puños fríos, que los pone en mi pecho y me hace saltar en la cama.

Ya no estoy en ese sitio. No sé dónde estaba, pero no era de seguro con mi amigo.
Ahora caigo y caigo en un pozo sin fondo, hasta que abro los ojos y veo... ¡Al fin a mi Chamán!
Ya no siento todo ese dolor, y me levanto no sin cierta dificultad. Gran Halcón me da agua a beber y me pide que le relate todo lo que vi.

Le cuento lo mejor que puedo la historia por que hay muchos detalles que no entendí, y se van borrando a medida que los cuento. Al terminar le comento que no puede ver a mi amigo, y él me dice:
- Sí, parece que no has podido llegar hasta él, pero mantén la esperanza, que es muy joven y sabe sobrevivir solo.

Me fui a mi tipi a descansar. Estaba agotado como si hubiese luchado en una gran trifulca.
El fuego de afuera del tipi no había llegado a apagarse, así que no estuve mucho tiempo dentro. Pero para mi había pasado quizá un día entero. No lo entiendo. Esta magia no funciona.
Solo tuve un sueño extraño. Como si el sol pudiese manejarse a voluntad o existiesen personas tan extrañas.

Creo que no tomaré más esas bebidas de Gran Halcón.



Mi verdad no es tu verdad.
La verdad existe sola.
Tal vez nuestra verdad,
se acerque a la verdad.

¿Por qué perseguimos la verdad?
Nunca la podemos alcanzar.
Si la atrapamos no la vemos,
Si la vemos no la entendemos.

Tal vez podamos oir la verdad,
Hablando con voz de sordo.
Nosotros oiremos sus voces,
Sin entender ni un poco

Singular destino el humano,
Buscando la verdad en todos lados,
Para atrapar con gran esfuerzo,
Solo ilusiones de verdad.

 


Nos leemos :)

sábado, 7 de diciembre de 2013

El humo - 280

Y sí, si menciono el humo, y pido completar la frase, estoy seguro que gran mayoría de las personas lo harán usando la palabra tabaco o un sinónimo. Me incluyo en esa mayoría.
Esto es así por que vivimos en éstas fechas y en éste lugar. Si viviésemos en Europa precolombina, el humo haría referencia mayormente al fuego de los hogares. Y esta respuesta se extendería a los demás continentes con la excepción del americano, y a todas las culturas, aún a culturas milenarias como las culturas chinas e indias.

Pero siempre existieron humos diferentes.

La fascinación por el fuego desde que el hombre aprende a dominarlo parcialmente, hace que su espíritu se regocije junto al calor necesario por ese cuerpo tan vulnerable al frío, con todos los detalles de la combustión. Desde el resplandor rojizo o amarillento, compartido con los demás seres queridos, el sonido de sus chasquidos y crepitares, hasta el aroma y el humo que sube y se pierde en el aire acompañado de nuestra alma viajera.

Este comportamiento lleva milenios junto al ser humano.
El humano llega a ser superior a otros seres de la naturaleza, también por ésta capacidad de manejar bastante bien el fuego.

Y nacen entonces los expertos en fuego, y de entre ellos los Chamanes, que buscan significados ocultos entre las volutas del humo y las cenizas retorcidas. La gran diferencia con el fuego necesario, el que sirve para calentarnos o para usos prácticos, es la posibilidad de quemar casi cualquier cosa que esté a nuestro alcance, y cambie el significado del hogar en fuego ceremonial, con objetivos menos terrenales.

Como casi todo se puede quemar, incluidos los seres vivos, sería muy extenso mencionar hasta dónde se llegó en estos artes del fuego y poco el aporte, por que todos tenemos bastante conocimiento al respecto.

Entonces en el mejor de los casos, el Chamán quema sustancias que llenan el aire con aromas y humos diferentes a los habituales con la finalidad de facilitar un trance o una comunicación entre el mundo terrenal y el mundo de la magia o el mundo de las almas, buscando sacar la mente del habitual razonamiento para pasar a un estado de percepción mas elevado.

Y me surge una pregunta compleja: ¿Cuándo pasa el uso del humo a tomar formato "lúdico"?
La respuesta que encuentro no deja de ser compleja. Si hacemos el paralelismo con el surgimiento de las computadoras, como una poderosa herramienta con costos elevadísimos por unidad, ¿A quién se le ocurre jugar con ella? Solo el experto puede jugar, así como solo al Chamán se le ocurrirá jugar con el fuego y el humo de sustancias que solo él consigue.

Ya tenemos a los culpables originales, jejeje.

En esas lejanas épocas donde jugar con el humo comenzó a popularizarse, la gente solía vivir treinta o cuarenta años de promedio y en el mejor de los casos quizá medio siglo. Habían mil y una manera de morir, casi todas ellas vinculadas a malos cuidados de la salud y a procesos infecciosos.
Pero hoy pretendemos vivir mucho mas que eso.
Con esa pretensión de vivir mas de cincuenta años, empieza a notarse la diferencia entre las formas de vivir de los individuos. Aquel que vive en el campo y respira aire puro, tiene sus pulmones en excelente estado a la misma edad que el deterioro llega a sentirse en los que respiran aire contaminado y además fuman. Por si fuese poco, el tabaco además de contener un veneno muy conocido en proporciones bastante altas, tiene la capacidad de generar adicción a su consumo.

Siempre estuve rodeado de fumadores.
Mi padre siempre fumó y siempre cargó con el sentimiento de culpa de no poder dejar el vicio. Su padre, mi abuelo, también fumaba, pero ya de otra generación, en que la inconsciencia no le dejaba ver el inconveniente de fumar.
Ahora mi esposa fuma. No quiere dejar por que está enferma y según dice es su única "diversión". Eso claro, si yo me divirtiese viéndola toser lapsos de veinte o treinta minutos sin detenerse, sería diversión para mi también... O si no se quemase ella misma por su falta de coordinación con las manos... Ni que decir que le han dicho que el efecto de los medicamentos que toma es menor si fuma, pero el vicio es el vicio.

Así que siempre durante mi vida he encendido cigarrillos pero nunca para mi. Se que podría fumar pero no quiero hacerlo. Y me siento afortunado de que mi hija haya dejado el vicio por conciencia propia. Medio punto a favor, por que mi hijo fuma.

Últimamente me he dedicado a observar fotografías de gente fumando. La llamada sensualidad del cigarrillo. Me puse a pensar en la diferencia que tendría la fotografía si en lugar de un cigarrillo el o la modelo sujetase una flor, una pluma u otro objeto pequeño y significativo dentro de la escena, y encuentro que al menos en las fotos, salvo por el humo, siempre es reemplazable el cigarrillo y quizá hasta con ventajas.

Así que solo queda como último valuarte, el consumo social, el invitar a alguien o ser invitado, el acercarse a alguien que de otro modo sería mas difícil de abordar.
Yo prefiero invitar con un chocolate. Al menos los que no sean diabéticos, quedarán agradecidos.

¿Cómo sacaremos de nuestra herencia milenaria el hechizo encantador del humo y las brasas del fuego?
Parece al menos que la conciencia no siempre es suficiente para tal finalidad.
Las personas prefieren engañarse a si mismas, y condenarse a una vida peor e indigna, cuando la vejez deje sentir sus efectos sobre el organismo. Un organismo deteriorado es una vejez mas complicada.

Miles de estrellas esta noche,
No se pueden ni contar,
Las más bellas quizá,
Mas las otras titilan,
Apenas se ven y ya se van.

Junto a la luz del fogón,
Las chispas suben con el humo,
Se esconden entre las estrellas,
Y el humo perverso tapa a las pequeñas,
Con su manto gris, sin dejar señas.

Ya después de la cena,
Arma su cigarro el compañero,
Lo fuma con placer sincero,
Juega con el humo de su boca,
Mientras cuenta muy quedo sus historias.

De no ser por su tos seca,
Todo sería perfecto.
Pero la tos es culpa del sereno,
Nunca será la culpa,
Del fiel cigarro compañero.


Nos leemos :)

martes, 3 de diciembre de 2013

Paz interior - 281


Tengo que hacer una confesión. Nunca fui una persona normal. Entiéndase por normal, a una persona cuyos gustos y costumbres caen dentro de la generalidad, del promedio de los gustos y costumbres de otras personas de su misma generación.

Siempre, y no por que lo buscase, estuve bastante afuera de la media normal.

Un ejemplo: En la ciudad donde vivo, el fútbol es un deporte sagrado, que TODOS juegan, gustan de él, de verlo jugar aunque nada más sea por la televisión. A los niños se les lleva de pequeños a integrar equipos de fútbol, cuando tienen 4 o 5 años de tierna infancia. Solo nos ha faltado incluir en las clases de historia las hazañas deportivas conseguidas durante la corta existencia de este país.

Pues no me gusta el fútbol.

Quizá de joven jugaba un poco por que era un juego, pero nada mas.
Y en mi época de adolescente, cuando iba al liceo, era un poco extraño para el resto de mis compañeros.
Recuerdo que un día de lluvia, al comienzo de las clases de tercer año, así que tendría 14 años de edad, en que había ido con un impermeable caminando lentamente bajo la lluvia, disfrutando el paisaje. Recuerdo haber cruzado alguna mirada con una señora que bajó del ómnibus conmigo y nada mas.
Resultó mas tarde que esa señora (que seguramente era bastante joven) era nuestra profesora de literatura. Y a mi no me gustaba para nada la literatura.

Pues la buena señora no sé por qué se fijó en mí desde el primer día.
Al ir leyendo la lista de alumnos de la clase iba haciendo pequeños comentarios para si misma, seguramente para ir recordando los nombres de cada uno, y al llegar a mi, dice en voz un poco mas alta "Ah, el del impermeable"... risitas de los compañeros, y yo que en ese momento me desayuno dónde la había visto antes. Siempre fui muy distraído.

En definitiva esta señora intentó en vano que me gustase su asignatura, y no puedo decir que no puso empeño. Era solo un problema de falta de madurez en mi persona. Sin embargo ella veía algo que no puedo sospechar, ni entiendo cómo lo veía.

En una ocasión nos pide una redacción de tema libre, y no mas de una carilla, tratando de usar un estilo que habíamos estado analizando en clase.
Hice mi redacción y me divertí haciéndola. Así que incluí algo de humor ácido de mi propia factura y algo de estilo. Nunca había esperado una respuesta tan eufórica. Parecía que le hubiese hecho un gran regalo. Tuve que leerla en voz alta, y soportar el análisis en clase del texto, hecho oralmente por mis compañeros.

No pasó de ser una anécdota. La literatura era difícil para mi. Y sigue siéndolo, pero aprendí a divertirme mientras escribo.

Otra persona que se fijó en mi forma de escribir fue mi cuñado Aníbal. Él era físico, y llegó a ser doctor en Ciencias Físicas, pero le gustaban la literatura y la filosofía, cosas que a mi siempre me espantaron. Sin embargo él me decía que debía tener en cuenta la posibilidad de escribir seriamente.
Aghh!!

La adolescencia pasó. Pasó mi juventud y aquí estoy, más maduro de lo que quisiese (de edad, que no de espíritu), escribiendo un poco.

Mi cuñado se estría riendo de mi con su risa nerviosa si me viese, jeje.

Pero lo que destaco como diferencia con mis compañeros era mi gusto por las series televisivas exóticas. Me apasionaba una serie que se llamaba "Kung-Fu", protagonizada por David Carradine interpretando al monje shaolín Kwai Chang Caine. En éso digamos que parecía ir con la corriente con otros adolescentes, pero no era así. Me gustaban las escenas de las enseñanzas del maestro Po y no las escenas de artes marciales que comentaban mis compañeros con lujo de detalles.

Admiraba esa paz que tenía el alumno, que había adquirido de manera misteriosa en un monasterio taoísta chino mientras era apenas un niño.

De esos años recuerdo mi paz interior. Disfrutaba de todo lo que me rodeaba, y solo mi padre lograba de vez en cuando sacarme de mis casillas con alguna de sus tareas que había que terminar para ayer...

Nunca fui religioso como mi madre, así que mi paz nada tenía que ver con veneraciones o rezos.

Pero a veces la vida toma caminos insospechados.
Necesité hacer cambios en mi vida para poder salir del encierro en el que habitaba cuando ya era bastante mayor. Conocí una mujer que parecía llenar un gran porcentaje de mis requisitos para una vida juntos y me fui con ella. Me casé poco después, terminé mis estudios y comencé a trabajar en un empleo estable.

No volví a disfrutar de la paz interior. Mi vida pasó a ser una especie de rutina, donde hasta las vacaciones eran rutina. La ilusión de mis hijos se fue desvaneciendo por que no disponía del tiempo para educarlos. Es muy poco lo que les pude dar.

Hasta mis pequeños proyectos se disolvieron entre las tareas diarias. Recuerdo haber encontrado hace unos años un cuaderno con ideas para cuando me recibiese, y con dolor lo que pude observar fue que de todos los proyectos, ninguno se hizo realidad.

Hoy mi adorada amiga me ha hecho reflexionar. Quizá eso es lo que uno debe buscar en los amigos, esa capacidad de ayudar cuando realmente hace falta. A mí, esta amiga me hizo falta al menos 10 años antes o quizá 20 o 30 años, pero las cosas son como son, y al menos la conozco y estoy feliz de contar con ella el día de hoy.

Así que volveré a ser lo que era y no lo que se espera que sea. Necesito esa paz para vivir con alegría mi vida, para disfrutar todo lo que tenga que venir, para tomar mis decisiones, para ser mejor.

No es que haya cambiado radicalmente, ya que los niños y los perros me quieren de manera natural, cosa que a mi entender indica que no estoy tan lejos de lo que pretendo. Es que pierdo la calma con relativa facilidad cuando me encuentro en situaciones irracionales. Tengo que asumir que el razonamiento no es una capacidad de todas las personas y en cambio mi enfado no conduce a nada.

Reinan el silencio y la oscuridad.
Abro los ojos y veo siluetas recortadas,
Los sonidos llegan desde la eternidad,
Y puedo escuchar hasta mi corazón.
Escucho más fuerte mi respiración.
Sentiría un pétalo de rosa cayendo.
La brisa trae olor a tierra mojada,
Ya no llueve afuera y comienza el alba.
El viento susurra cosas que no entiendo,
Tal vez vengan de una garganta lejana.
¿Serán tus sabias palabras?
¿Serán palomas agitando sus alas?
No importa, estos minutos son míos.
Puedo pensar con libertad,
Casi siento que tengo alas !!
Y tú vienes a mis pensamientos,
Con tu sonrisa tan clara.
No puedo evitarlo ni quiero,
Pues la felicidad me embarga.
Estoy solo y no lo estoy,
Estoy a solas con tu alma.


Nos leemos :)

Nota: Si no puede ver la segunda imagen, es por que está usando un browser rígido y anticuado, que no se ciñe a las normas internacionales. Use Firefox o Chrome por ejemplo, y le aseguro que no se arrepentirá.

sábado, 30 de noviembre de 2013

El Abrazo - 282

El abrazo surge de manera primitiva entre la madre y sus hijos, cuando debe sostenerlos para alimentarlos y darles protección y calor luego del nacimiento. El recién nacido humano es sumamente vulnerable, así que su madre toma la tarea de criar a sus hijos prodigándoles cuidados de todo tenor, mientras se van desarrollando y van aprendiendo a sobrevivir solos. Otros miembros de la familia como padres y hermanos aprenden a cuidar también de los pequeños, y sustituyen por momentos a la madre sujetando en sus brazos a las criaturas.

Es así que poco a poco, de forma espontánea, todos los integrantes de la familia y amigos, aprenden a abrazar primero a los más pequeños. La costumbre permanece en el tiempo por lo positiva que es, aún cuando la protección del abrazo ya no sea necesaria. Se usa entonces como medio de comunicación de sentimientos de muy variada índole, y por lo primitivo de su origen es entonces uno de los medios más cálidos de comunicación que existen.

Dado que pueden ejercer esta costumbre tanto los familiares como los amigos, el abrazo se vuelve en algunas sociedades, el medio universal de comunicación y saludo que tiene el mayor contacto corporal entres los individuos. Es el que más calidez transmite entre los ejecutantes.

No todos los abrazos son entonces iguales y hay bastante de lo que se dice en un abrazo, que se transmite en la medida de la profundidad y la duración del mismo.
Aún en el caso del abrazo mas sutil, existe cierta dulzura que no hay en otros comportamientos sociales, como por ejemplo estrechar la mano.

No en todas las sociedades ni en todas las épocas, se usa el abrazo como medio universal. Algunas sociedades lo restringen a los amantes y la relación de madres a hijos, quitándole la universalidad. Este modo de rechazar socialmente el abrazo universal ha sido criticado desde dentro de la propia sociedad afectada por esta carencia y por ejemplo tenemos al movimiento "Abrazos Gratis" o "Free Hugs" que está documentado recientemente en Internet.



Recuerdo que cuando mis padres vinieron de España, era una costumbre que los familiares se abrazasen. Mis primos me daban un abrazo y un beso y aquí en Uruguay no se veía bien esta costumbre. Por suerte hoy día las cosas han cambiado para mejorar en éste aspecto.
Pienso que en este cambio como en muchos otros, las comunicaciones globales y una sociedad abierta a ellas, han tenido su influencia.

Entonces tenemos que el abrazo acerca más a individuos que ya de por sí están cerca. ¿Pero, qué ocurre cuando el abrazo se hace una costumbre y llega a ser una necesidad? ¿Qué ocurre cuando las personas que queremos abrazar están físicamente lejanas?

¿Cómo abrazas a tu amor, que está lejos, distante en el espacio pero cercano a tu alma?
-Solo le abrazas con pasión, y seguro te sentirá.
Tu corazón y el suyo son uno en este universo, así que lo que sientas ha de sentirlo también.
Quizá las palabras sean solo eso, pero si comunican un sentimiento, estarán a un nivel mas alto que el de ser solo palabras. Son símbolos etéreos, que acortan distancia y nutren el alma.
No es lo mismo un "Hola, ¿Cómo estás?" que un un pequeño "Te quiero", dicho por la persona que está dentro de tu corazón. Desde dentro no parecen palabras, parece que se tensasen imperceptibles hilos de seda, conectando tu alma y la mía, moviendo tu corazón al ritmo del mío.
Es de ésta manera que una gran emoción puede llegar a hacernos sentir ese abrazo que anhelamos y que brindaríamos con toda el alma si la persona que lo merece estuviese cerca.

Me dices que me quieres,
Y lo repites con pasión.
Me das lo mejor de ti,
En esas tiernas palabras,
Que me llegan con tu amor.

Como pequeñas gotas de lluvia,
Mojan mis ojos y mis mejillas,
Me hacen temblar, suspirar,
Y siento el calor de tu pecho,
Abrazado al mío, sin hablar.

Cuánto puede dar ese abrazo,
Cuánta ternura, cuánta paz,
Cierro los ojos y ahí estás.
Necesito sentir tu calor,
Y también éso me das.


Nos leemos :)

miércoles, 27 de noviembre de 2013

El amor Infinito - 283

Hay un concepto en el pensamiento matemático que es muy sencillo de entender sobre todo para los niños pequeños. Quizá sea mejor ser niño que adulto para obtener las conclusiones de este razonamiento por primera vez, pero como es tan popular, es de esperar que aún quienes no han dado demasiada importancia a las matemáticas, hayan alguna vez pensado en el tema desde estos puntos de vista que expongo.

Supongamos que el niño que será "víctima" de nuestra charla es uno que sepa contar y escribir números naturales, esos que se obtienen cuando uno cuenta cualquier colección de objetos.

Le decimos entonces:
- ¿Sabes tú cuál es el número mas grande? ... Si nos mira de ojos abiertos, una expresión pensativa, y tiene el valor de decir "yo no sé,... ¿será mil?..." o alguna respuesta similar, quiere decir que hemos capturado su atención y tenemos un conejillo de indias excelente para aportarle un miligramo de educación, jeje.
- Pues vamos a razonar así: tu número más grande es ese "mil", que me parece un número importante, pero ¿sabes cómo puedo convencerte de que no es ése el más grande?... Solo tienes que contar a partir de ése número en adelante. Todos los números que estén después son mas grandes.
- Ah, claro, ¿y cuál es el número mas grande entonces?
- ¡Buena pregunta! Siempre que encuentras un número, podrás contar a partir de él en adelante. Este procedimiento de seguir la cuenta nos dice que elegido un número, siempre encontramos otros mas grandes.
- ¿No existe entonces ese número que sea más grande que todos?
- Bueno, podemos decir que sí existe. Es un número que se llama infinito, y tiene reglas particulares para ser tratado como número. Por ejemplo si cuentas a partir de él, tendrás que sumar primero 1, luego 1 más, y así como haces siempre que cuentas. Pero en el caso del infinito la regla es que si le sumamos cualquier número el resultado es él mismo. El resultado es siempre infinito.
- Así que el infinito es un número especial, ¿no?
- Bastante especial.
- Y si sumo infinito con infinito, ¿qué resultado dará?
- Solo infinito. No existe el doble ni la cantidad de veces que quieras el infinito. Es siempre infinito.
- Bueno, me voy a jugar...

¡Qué bueno! Hemos plantado una duda, una semilla que puede germinar en curiosidad en el futuro, y no en la clásica resistencia hacia la hermosa herramienta humana que es el razonamiento matemático.
El verdadero reto es conseguir que el niño no se vaya a jugar en éste punto de la charla, pero para eso se necesita cierta genialidad educativa que siempre me fue algo esquiva.
Parece todo muy "teórico", o sea que inventamos reglas, las cumplimos y nos quedamos felices y contentos.
Y ahora que somos grandes, además de teoría, ¿para qué puede servirnos este concepto?

Casi por accidente,
Jugando comencé a amarte.
Quiero recordar cómo fue,
Cuándo ocurrió y por qué,
Pero no puedo.

Después de conocerte,
Apenas un poco,
Me doy cuenta que,
Muy lejos de mi estás,
Pero ya no hay vuelta atrás.

Leo todos tus mensajes,
Lo hago día tras día,
Siempre de a poco.
Juntando tu amor,
Todo en mi interior.

Y voy sumando día a día,
Ese cariño que me das,
La suma es mas grande,
Cada día mas y más,
¿Hasta cuánto?

¿Cabe en mi todo ese amor?
Llega a mí y se multiplica,
Y lo guardo en mi corazón.
¿Cómo es posible que siga
Creciendo sin pausa este amor?

Mi niño interior
Tiene la respuesta.
Dice que la capacidad de amar
Es infinita,
Aún cuando nuestras vidas no.


Nos Leemos :)

lunes, 25 de noviembre de 2013

Esperanza - 284


¡Qué hermoso nombre de mujer, es Esperanza!
No sabría decir por qué me parece hermoso, pero puedo imaginar de niña a la pequeña Esperanza saltando y corriendo por todas partes, y quizá sea una visión optimista, pero parece un símbolo vivo de lo que uno espera que la vida sea. Esperanza adulta, feliz y virtuosa, no le va a la zaga en imaginación.

Así como uno espera que el árbol que plantó retoñe fuerte, o como espera el campesino que su siembra llegue a la cosecha sin percances, todos tenemos nuestras esperanzas puestas en algún objetivo.

Ese sentimiento que es la esperanza, es hermoso e incontrolable al mismo tiempo.

No por tener el campesino toda su esperanza puesta en su siembra, logrará que la cosecha sea rendidora. Hace falta además que un cúmulo de variables fuera de su control, todo lo que llamamos clima, sea benéfico así sea nada más en su pequeño terruño, donde se halla plantada su esperanza. Y no hablemos de otros factores, como la economía !!

Todos tenemos alguna esperanza. Algunos esperamos que nuestros hijos al menos lleguen a ser personas especiales, honestas, felices con su propio ser.

Otros esperan poder completar una serie de expectativas en el corto lapso de sus vidas. Y casi siempre ambicionamos no morirnos nunca ni envejecer, pero la realidad nos va mostrando como es la vida de inexorable, intrincada e impredecible.

Así que ponemos nuestra esperanza entonces en nuestras metas, aunque que no siempre se podrán alcanzar.

Claro está que la lucha por las metas depende en mayor medida de nuestra voluntad y nuestro empeño, y es éste factor que nos inclina a tener esperanza en el futuro.

Siempre estará ese imponderable que puede cambiarlo todo, pero no siempre aparece en nuestras vidas, ni en todas las circunstancias.

No hay que confundir la esperanza del haragán o del religioso desubicado, que pretende lo que se llama "un milagro", que es obtener la recompensa sin haber mediado el esfuerzo en la tarea.
No confundamos tampoco con la esperanza del rico, que entrega una bolsa llena de billetes verdes (color esperanza) y obtiene el título de cura para su hijo.

Ese sentimiento puro que es la esperanza, es hasta fuente de alegría.

Cuan desastroso puede llegar a ser borrar la esperanza de nuestros días, y despertar sin al menos la ilusión de que "hoy puede ser diferente", o "hay otra oportunidad".
Si el hombre pierde los sueños, lo pierde todo. Solo le queda esperar a la fría y seca muerte, a que venga a llevarle de este mundo indiferente.


Mi esperanza.

Siempre te espero,
Por que se que vendrás.
Espero ese pequeño cariño,
aguardo esas palabras.
Tu amor espero.

Tiemblo a veces pensando,
Por qué es que demoras.
Si es que falta interés,
O si te faltó tiempo.
Y yo te espero.

Pero sé que te ocurre igual,
Como yo, también esperas.
Unas palabras de amor,
Una muestra de cariño.
Y tú me esperas.

A veces mi humor no es bueno,
Y mi alma desespera.
Pero me atrae tu luz,
La pasión por sentirte.
La esperanza de tenerte.

Renuevo esta esperanza,
Día a día la renuevo.
Renuevo mi ilusión,
Es por tanto que quiero.
A ti es que te quiero!



http://fc00.deviantart.net/fs71/i/2010/144/9/b/Hope_by_delilah88.jpg
Nos leemos ;)

martes, 19 de noviembre de 2013

Despertarte - 285


Mis ojos están abiertos
Y tú duermes en calma.
Mis dedos se deslizan lentos
Por tu pelo en la almohada.
Y nada.

La persiana está mal cerrada
El tímido resplandor lunar
Atraviesa las rendijas
Te baña con luz de plata.
Y nada.

Me acerco más a ti,
Junto muy juntos,
Te acurrucas, suspiras,
Y casi me abrazas.
Y casi nada.

Ya mis manos están
En la senda de tu piel.
Ya mis labios envidian
El camino de mis manos,
Y abres los ojos, en silencio.

Respiras muy profundo
Me miras desde un sueño,
Tu cuerpo se estira
Como lo hace un gato.
Y me das un beso.

Ese beso se convierte
En catarata de besos.
Ahora solo descanso
Para ver tus ojos bellos.
Y me das tu sonrisa juguetona.

Alma descarriada que
que lucha conmigo en el lecho.
Tengo que atraparte
Tomar tus manos entre las mías
Y ahí puedo devolver tu beso.

Pero el juego se hace adulto
Sin palabras sin descansos.
Me embriago de ti,
Los dos somos uno.
Y no se donde termina mi cuerpo.

Ahora la luz se avergüenza
Toda roja se ha puesto.
Miro por las rendijas y digo
¡Ven conmigo a ver ésto!
Y me das ese amanecer en silencio.


Quizá no sea el sexo la culminación del amor en la pareja, ¡pero como ayuda ésto!
El brillo de tus ojos lo puedo ver en silencio, lo puedo ver si te ríes, lo puedo ver si me cuentas algo con entusiasmo o con afecto.
Si vamos caminando juntos o me hablas por teléfono, puedo ver ese brillo inmenso en tus ojos, que viene desde alma adentro.


Nos leemos :)

lunes, 18 de noviembre de 2013

Luna Traviesa - 286


Las palabras son solo eso: Palabras.
Algunas son nombres para las cosas, otras lo nombres de las acciones, y luego hay algunas palabras más para conectar todo y armar la prosa.

Pero parece que tienen jerarquías, como en las sociedades todas.
Hay palabras para todos los días, hay palabras para la poesía, para las leyes, para la ciencia y para cada actividad donde el saber ha necesitado nombrar cosas que en el pasado no importaban.

Y entonces, ¿Se pueden mezclar las palabras? ¿Entenderemos lo que se dice al mezclarlas?
Parece que es una afrenta mezclar las jerarquías, como mezclar reinas con labradores.
¿Qué tan feo es que la reina bese al labrador?

La luna juega conmigo
Me sigue y me cuenta cosas.
Ella puede ver tu jardín
Se oculta tras una nube
Y te espía para mi.

Me dice que lees dichosa
Sonriente al paginar tu libro.
Que luego apagas las luces
Pones la música suave
Y disfrutas de su luz.

Es esa luz que te ilumina
Y me ilumina al mismo tiempo.
Es ese baño de fotones gemelos
Que está por aquí y por allá
Uniendo libres nuestros sueños.

Yo no puedo ir con ellos,
Pero Luna clara me cuenta
Como la intangible brisa
Esculpe todos tus contornos
Para en la noche verlos.

Tramposa Luna me cuenta cosas
Y yo lamento no verlas
Hay que imaginar esas curvas
Y sentir cuan maravillosas son
Al tacto inmisericorde del fotón.

Nos Leemos :)

Las herramientas - 287

Estoy hecho un desordenado, y me pesa terriblemente. Es que mi esencia no es la de comportarme de este modo. Siempre disfruté el orden.
Tengo montañas de cosas apiladas de manera incomprensible.

Mi suegra a esta altura se cree que soy una víctima del síndrome de Diógenes, pero claro, para ella todo califica como basura.
Su máxima es "si no lo usaste en un año, es basura"...

Tendría que ir a su armario y decirle ¿Hace cuánto que no miras esas fotos familiares? ¿Acaso son basura?
Y seguirían los ejemplos, pero no, eso no se hace, por que después quién convive con ella. Además lo importante no es tener la razón, si no poder vivir en paz. Es un balance entre saber que uno tiene la razón y callarlo, o vencer en algo sin importancia, por que la victoria puede llegar a ser muy escabrosa.

Todo esto me hace recordar el taller de mi padre.

Mi padre llegó a este país con un título y cierta experiencia laboral. El problema que tuvo que enfrentar fue que no existían reválidas para el título que él tenía, el país estaba muy atrasado, y como siempre, se abusa del que está más desprotegido. Si no naciste en un país y llegas a él de mayorcito, sin dudas estás desprotegido. Hay miles de costumbres que aprender, de "trucos" que saben los que nacieron en ese lugar.

Así que, desprotegido, trabajó en distintas empresas, pero en todas abusaron de su buena voluntad.
Este problema y otros propios de su carácter, o mal carácter mejor dicho, hicieron que su salud declinara bastante, a pesar de lo fuerte que era. Y yo fui sus ojos brazos y piernas por bastante tiempo.

Anteriormente, cuando yo era bastante pequeño, mi padre se propuso hacer un curso de profesorado, para al menos no tener tanta explotación física de sus empleadores, y tener un reconocimiento social. En aquel entonces estaba bien visto ser docente, y los sueldos eran razonables.
Recuerdo hasta haber colaborado en rellenar de colores alguna lámina didáctica de las que usaba en sus clases, dado que siempre fui cuidadoso para la pintura.

Toda esta frenética suma de actividades hacía que su pequeño taller que teníamos en una habitación del apartamento donde vivíamos, restos de uno de sus emprendimientos comerciales en un taller de reparaciones eléctricas, fuese un desorden total.

Y allí aparezco yo :)  Pequeño, aburrido y curioso.

Aquello era un gigantesco rompecabezas todo para mi. Encontraba una pieza con forma extraña, y buscaba la explicación. Mi padre me decía: Esa es la pieza tal y cual de la máquina aquella que no se llevó un cliente, etc. etc. todas pistas para mi... Me ponía a buscar y encontraba el resto de las piezas que encajaban perfectamente, y en los mejores casos llegué a armar por completo el aparato que estaba disgregado en diferentes latas de duraznos, de arvejas o en cajas de cartón.

Así fui ordenando de a poco las cosas, y con unas tablas que estuvieron años en un costado de la escalera hice estanterías para poder colocar todo y liberar el piso, para poder caminar sobre él.

Viendo con criterios de adulto de estos tiempos, y no de aquellos, había objetos que no merecía la pena guardar, mezclados con otros que tenían valor. Pero en aquel entonces, la escasez era reina y todo tenía valor.

Mi padre me enseñó a manejar todas las herramientas que tenía y me alentaba a que aprendiese por mi mismo. A mi me molestaba no poder llegar al grado de perfección que él tenía con las herramientas, pero siempre me dijo que eso se aprende con los años. Nunca dejé por lo tanto de practicar.

También me decía que tener herramientas era como tener un seguro de desempleo. Si por algún motivo no podía conseguir un trabajo normal, siempre habría algo que podría hacer con mis herramientas para ganar dinero y subsistir dignamente.

Hoy día no tengo sus problemas por que vivo en el país donde crecí, y tengo un empleo que me deja vivir, pero sigo teniendo las herramientas. Ahora son una obsesión y no una necesidad. Increíblemente he encontrado que hay un enorme placer en hacer algunas cosas por mi mismo o reparar cosas que normalmente se tiran a la basura, en ese balance que hay entre el precio de lo nuevo y el costo de reparar.

Y después viene el arte, y hasta un poco de ciencia... y las herramientas están allí, y yo las se usar.
Así que puedo decir que la herencia de herramientas que me dejó mi padre no es solo material. Me dejó pegado a ellas una forma de ver las cosas, una visión diferente al común de la gente, y sobre todo, la utilidad de mis manos.

El tenía otros vicios, como el de coleccionar libros. Mi casa tenía una biblioteca que algunas instituciones podrían llegar a envidiar por su variedad. Yo tengo unos cuantos libros, pero nunca llegué o llegaré al extremo al que él llegó. Bueno, si cuento mis PDF... mejor no los cuento!

Así que ahora cuando tomo mi herramientas para reparar algo o enfrentar algo nuevo, siempre tengo un recuerdo de esos tiempos en que aprendí tantas cosas junto con mi padre.

No era fácil vivir con él. Su mal carácter era bien conocido por todos, y a pesar de que me quería mucho, me hacía difícil la existencia si no obedecía su guía fielmente.

Yo fui creciendo y finalmente estas discusiones nos separaron. Hasta me fui a trabajar fuera de casa por un sueldo de miseria mientras estudiaba ingeniería, con tal de no soportar sus ridículas exigencias.

Bien me mostró que me estaban estafando, pero para mi era un alivio estar lejos de él un tiempo.

El crecer y buscar otros horizontes es una realidad en casi todos los hijos, y es posible que de no mediar ese mal carácter típico de mi padre, de todos modos me hubiese ido de casa, pero no de mala manera. Solo me hubiese ido para mejorar.

Y sin duda alguna la mayor víctima de su mal carácter fue él mismo.

Siempre me molestó la actitud de mucha gente en los velorios y entierros, donde se ensalza al finado y se le pone casi en un trono de perfección, recordando sólo sus virtudes. Todos tenemos virtudes, y también defectos. Es justo entonces recordar a la gente como en realidad fue.

Hoy día me sigue molestando que él me haya dicho "esa mujer no te conviene" cuando decidí casarme con mi esposa. Tenía razón, como en otras ocasiones en que le llevé la contra, pero eso no lo hace perfecto.
Hay mil maneras de dar una opinión, y el estilo arrogante es el peor de todos.

Hoy estamos cerca de los diez años desde que él dejó de vivir.
A veces me parece que voy a recibir una llamada diciéndome ¿Ya terminaste de usar la herramienta, me la puedes traer a casa?

Pero es justo reconocer que ahora sus herramientas sobreviven en medio de las que yo he ido comprando conforme pasan los años. Algunas duplicadas, de la época en que tenía que retornar todo a su lugar...

Voy a tener que ordenar este desastre ;-)

Nos leemos :)

sábado, 16 de noviembre de 2013

Ráfagas de primavera. - 288

Hoy el viento se ha hecho sentir todo el día.

Es normal que haya viento en la primavera, pero en ésta que nos ha tocado este año, ha sido más frecuente el agua que el viento.
Con este viento se escuchan cantar y silbar todas las ventanas y chimeneas. Hasta alguna botella destapada que han dejado sobre un muro, produce su tono peculiar, al son del viento.

Parece que de sus tumbas nos viniesen a contar cosas nuestros antepasados y los antepasados de ellos.
El ulular del viento en la tranquilidad de la noche, nos hace imaginar insospechadas historias que están allí, día tras día sin despertar, esperando estos momentos.

Yo siento como si este viento trajese mensajes de otros cielos mas lejanos. Quizá tus mensajes.

Disfruto de algo que sé que no le gusta a todos, que es ponerme de frente al viento, con los ojos resguardados, para sentir la fuerte caricia por la cara y el pelo volando por completo. Es el único tacto que puedo tener con tan extraño elemento natural, como es el aire en movimiento.

Recuerdo de niño, el aprovechar estos días para hacer alguna cometa, con caña y nylon de colores. Llegué a ser bastante bueno en ese tema, pero no tenía muchos lugares donde remontar mis cometas sin que el hilo se trabase en cables y árboles. Así que tenía que irme lejos, unas 10 calles hasta la orilla del mar para poder disfrutar de verla volar hasta donde alcanzara el hilo.

Con mi hijo Darién hicimos alguna cometa pero faltó entusiasmo, el que te impulsa a hacerla por ti mismo, a equivocarte y preguntar por qué no funciona, hasta que viene alguien y te dice el secreto del diseño.
Con mi hija Sasha solo faltó la oportunidad, aunque no sé por qué las niñas no suelen tener el mismo interés en las cometas.
Creo que alguna vez voy a repetir la experiencia de volar una cometa casera. Esto no puede terminar así.

Pero hoy el viento no me habla de cometas, hilos y colas de telas de colores. Hoy el viento me habla de ti.

Las ráfagas traen un perfume que me enamora.
En su idioma me hablan de ti, de tu sonrisa.
Espero sentir cada una después de la otra.
No quiero perder nada de lo que cuentan.
Yo soy la orilla del mar para esas olas.
Se dibujan transparentes, altivas y sinuosas.
Te mando con una de ellas que quiere volver
mi sonrisa, un abrazo y un gran beso.
Quizá llegue cansada y sin fuerzas,
Ya no ráfaga, sino brisa leve y etérea.
Así que cuando sientas esa brisa que te besa,
Y al abrir tus ojos yo no estoy allí,
Es por que el beso es de mi hechicería personal.
Forjado con toda mi alma solo para ti.
Sabiendo que el beso es mío, sentirás el abrazo.
Y mi sonrisa iluminará la tuya amor,
Para que tu luz propia sea mas intensa aún.

Tener amigos es tener fortuna.
Tenerte a ti es tener un tesoro que no se calcula.


Nos leemos  :)

viernes, 8 de noviembre de 2013

El amor que te di - 289

Todo el amor que te di
creo, vale poco, si no estoy junto a ti.

Estoy enfermo y no es un virus
mi mente febril reproduce sensaciones
y te veo junto a mi 
en todos los lugares y rincones.

No puedo evitar pensar en la dicha
que tendría con solo abrazarte.
¿Cuánto pueden valer esos instantes?
Valen quizá mas que la vida que perdí.

¿Y si te veo sonriente mirándome?
Me dedicas esas miradas en silencio
que dicen lo que yo quiero oír
cada día, en cada instante.

¡Qué daría por atraparte distraída
y robarte un beso, darte un "te quiero"
para escuchar extasiado
la risa en tu voz!

Todas mis fibras se tensan si pienso en ti.
Quiero sentir tus manos mientras
caminamos por alguna senda,
tu y yo en la inmensidad de este mundo.

No se a dónde quiero ir,
solo contigo amor.
Tampoco quiero morir
lejos del brillo de tus ojos.


Mas de una vez te he dicho cuánto te quiero.
Pero no te preocupes. Te lo seguiré diciendo :)
Dedicado a una pequeña revoltosa, que me hace temblar el piso y enreda mi vida por completo.
No se si soy lo que buscas aquí en la tierra. Solo se que tú eres lo que yo buscaría en el cielo.

sábado, 2 de noviembre de 2013

Amor enlatado y amor cotidiano - 290

Unos comentarios acerca del enamoramiento.

Del sitio que se llama "La torre del silencio" reproduciré unas palabras. Ruego que las leáis de su autor y en su contexto para entender completamente el significado de las mismas.

"
El Amor:
Me preocupa la gente que dice que anda buscando el amor, como si el amor ya estuviera por ahí listo y terminado. Como si existiera un amor enlatado, un producto diseñado que eliges en algún escaparate. Se han creído el cuento del amor prefabricado que nos venden en las películas de domingo en la noche o que nos cantan en la radio. Uno no busca el amor, uno lo construye"

No pretendo aquí tratar de opinar en contra del autor, y en cambio solo deseo aclarar  algunos conceptos que no siento del todo evidentes.

Si bien entiendo que el amor es una tarea cotidiana, no se trata de la misma tarea en diferentes personas.
Algunos optan por una ceremonia en que comprometen su amor hacia el futuro, y luego le dan una mínima importancia al concepto de enamorar a la pareja, sin dejar de quererse ambos. 
Otras parejas dan mucho mas importancia a esta visión del amor cotidiano, y dejan las ceremonias en un segundo plano, o hasta no las ejecutan en algún caso, pero en cambio ejecutan pequeñas "ceremonias" demostrativas de afecto, y con relativa frecuencia.
Y como siempre, encontraremos toda una gama de parejas que adoptan puntos intermedios entre estos dos extremos, todos ellos válidos siempre que los dos integrantes de la pareja lo entiendan del mismo modo.

martes, 22 de octubre de 2013

Alegría - 291

Es una curiosidad que siempre he tenido, el saber qué mueve a escribir a un poeta.
En mi caso el ejemplo no vale, es claro, pues de poeta no hay ni medio pelo en mi oficio.
Suena lógico después de una vida dedicada a otros menesteres.
Y retornando a la pregunta que no terminé de formular: ¿Le mueve mas la tristeza que la alegría a todo escritor que viva como tal?

Los que puedo analizar con mis precarios sentidos literarios, son en general de este calibre.
Aún cuando están felices o pretenden estarlo, escriben por que están lastimados, heridos de algún modo, sangrando letras y frases.

Recientemente encontré este cartel, que oh curiosidad, había visto impreso en una fotocopia decenas de años antes y con la misma tipografía. Me sorprende a veces encontrar estas cosas viejas en la red.
Se traduce algo así como:
La gente grandiosa habla acerca de ideas
La gente promedio habla acerca de cosas
La gente pequeña habla de otra gente

Ya la idea en el cartel es bien clara, y en alguna circunstancia que otra vale la pena tenerlo impreso en buen tamaño para colgarlo de algún muro en particular, quizá cerca de los sitios de descanso y conversación. No es mala idea pedir sutilmente a las personas un comportamiento socialmente racional.

De todos modos la idea del cartel aquí es no desmenuzar el estilo de nadie en particular, por que no parece adecuado, y para ser consecuente con las conducta deseable de hablar de ideas y no de gente, no lo haré. Es además una buena excusa para ocultar la ignorancia que tengo sobre algún que otro poeta.

Encuentro pocos ejemplos de odas a la alegría que no mencionen algún hecho triste aunque sea de pasada, para decir "ésto es lo que NO hay que hacer o sentir". Solo refiero a ese punto, que en realidad hay menos literatura sobre la alegría que sobre otros estados del ánimo.

No se por qué ahora me suena el estribillo de una canción del grandioso poeta brasileño Vinicius de Moraes que interpretaba la prodigiosa voz de María Kreuza:

Tristeza não tem fim
Felicidade sim

Curiosamente, la canción se llama "A Felicidade", y está dedicada al Carnaval Carioca.
Así que esta puede ser una pista del por qué de tanto escrito acerca de la tristeza y tan poco sobre la felicidad.

Finalmente tomaré el toro por los cuernos e intentaré algo alegre para variar, ya que yo también me las traigo con los temas tristes, y si puedo sumaré algo de mi dactilografía (que de puño y letra me queda muy mal) al acerbo cultural castellano de este mundo cibernético. Y para hacerlo simple, que sea solo un instante.

Instantánea de chica feliz

Hoy puede ver tu alegría en esa foto.
Que mas que sonrisa era expresión de gozo.
¡Qué encanto, que dicha, verte de ese modo!
Se contagian las comisuras de mis labios,
Y no puedo mas que ser feliz como tonto.

¡Yo también quiero ser parte de ella!
Quiero quedar retratado en tu foto.
Mi alma voladora llega a besar esa quimera,
Y quiere ir tomando la vida a grandes sorbos,
Dándote mi amor sin límites ni estorbos.

Quiero a la luna cantar que es sincero,
Mi amor por ti, mujer de oro.
Quiero a los mares gritar que es inmenso
Mi amor por ti, mi gran tesoro.
Son para ti mis mejores días claros.

Pues bien, está un poco cacofónico, pero parece alegre ;-)
De seguir por esta ruta seguramente agregaría versos de un tenor mas para lectura de adultos, así que lo dejo por aquí hasta que me anime a poner tanta pasión en mi escritura sin llegar al mal gusto que tan ampliamente difundido está.
Es que soy nuevo en este arte de soldar palabras y encadenar conceptos.

Nos leemos :)

domingo, 20 de octubre de 2013

Lejanos recuerdos - 292

Es difícil olvidar.
Cuando uno quiso a una persona por mucho tiempo, olvidar no es posible.
Quizá sea por que no es deseable olvidar en estos casos. Los pequeños detalles son parte del camino que es nuestra vida. No somos un camino sin comienzo y sin mitad. Nuestra vida es un camino desde la tierna infancia de nuestros primeros recuerdos hasta el hoy.

Lo interesante es recordar lo que a nosotros nos va formando. Lo demás quizá uno lo tenga en el fondo del baúl de los recuerdos, pero no lo alimentamos para que sobreviva y lo dejamos morir así, de hambre de recuerdo.

Es así que por un hecho fortuito, recordé algunas cosas de mi infancia, y entre ellas, como no podía ser de otra manera, recordé a mi madre.

Tuve la suerte de tener a mi madre en tiempo casi completo cuando era un pequeñín. Solo las tareas de la casa y de su trabajo de costura la apartaban apenas de mi.
Así que los dos fuimos juntos creciendo en aquella lejana época, junto a mi hermana, que por ser diez años mayor que yo, era como una segunda madre, una segunda opinión y además alguien que me consentía.
Mi padre también vivía con nosotros, pero trabajaba mucho y no era tan accesible como mi madre y mi hermana.

Hablando estos días con mi hermana, haciendo memoria del pasado, ella tiene historias que yo no conozco por que las vivió. Y probablemente por que cuando yo me fui de casa y ella quedó viuda, volvió a vivir con mi madre y mi padre que ya eran ancianos y tuvo muchísimas mas charlas con ella que las que yo pude tener.
Está además el hecho es que mi esposa por motivos que no comprendo ni comprenderé, no se llevaba bien con mi madre, y a pesar de vivir cerca de casa, la pude ver con poca frecuencia.

Una de las cientos de historias que me ha contado involucran a personas que nunca conocí, como mi abuela materna. Estrella se llamaba esta abuela, al igual que mi hermana, que tiene su nombre en honor a nuestra abuela. Aunque el nombre de mi hermana no es completamente igual. Ella se llama "Estrella de la Luz" y mi abuela solo Estrella.

Para describirla diría que es buena una broma que le hacía su compañero. Él le decía que si fuese cuatro dedos mas alta, sería la mujer mas bonita de La Coruña, haciendo referencia a que era muy bajita. Pero no solo era baja de estatura, sino que estaba todo su cuerpo en esa proporción, y en las noches los muchachos la confundían con otras niñas, confusión que siempre fue motivo para risas y bromas.

Yo supongo que todo este pequeño tamaño de ella fue parte de sus problemas. Sufría algo que en aquella época los médicos llamaban "fiebre reumática" con ataques que la llevaban al hospital. Al hospital de pobres, por supuesto.

Cuando oigo la frese "todo tiempo pasado fue mejor", siempre pienso en lo terriblemente equivocada que está. En aquella época, solo la aristocracia accedía al conocimiento y los médicos eran por lo tanto de este origen poco humilde, y no adquirían nada de humildad mientras estudiaban. Así que los pobres eran siempre pacientes de segunda.
Hoy algo de eso se conserva en el hecho de que algunos tratamientos son demasiado onerosos, pero al menos los médicos son diferentes.

El caso es que mi madre se llamaba Luz.
No se cual fue el motivo por el cual mi abuela Estrella puso a su única hija el nombre Luz, pero no deja de ser poético al menos. Estrella parió a Luz, mi madre. Si decimos que Estrella dio a luz a Luz, las cosas quedan un tanto confusas, al menos en cuanto a la sonoridad de las palabras.
Pensando en otros idiomas como el italiano o el portugués, los nombres llevan delante un artículo para que estén bien dichos, y entonces se habla de "la Luz" o "la Estrella" para referirse a las personas, cosa que no hacemos en la lengua castellana.
En estas lenguas queda claro que "la Estrella" parió a "la Luz", y yo al menos soy "hijo de la Luz", jeje.

Luz era una persona muy especial. No solo para mi modo de ver, por ser ella mi madre.
Vivía cantando mientras trabajaba. Según ella cuenta, cuando aprendió costura, había varias muchachas que como ella cantaban, pero en ocasiones se daba cuenta que se callaban para escuchar su voz. O en la escuela que la maestra la ponía a ella a leer "Corazón" y los niños lloraban escuchando la lectura.
Así que canturreaba o cantaba, pero nunca se callaba.
Entre esto y la música clásica que escuchaba mi padre no entiendo cómo nunca se me dio por estudiar al menos un poco de música. Supongo que tendrá que ver con una ocasión en que me echaron de un coro en secundaria y me dijeron "vuelve cuando tu voz haya terminado de cambiar". Pues no volví.

Mi madre había sido criada con mucho sacrificio de mi abuela Estrella, que en aquellos momentos trabajaba como cocinera en la casa de un buen doctor. Su vida fue difícil, pero salió adelante y era mucho mas alta que su madre. Siempre sonriente, era una de sus características. Me decía a mí que sonriese también, que mi sonrisa era bonita, pero creo que en ella primaba la visión de una madre y no la objetividad.

Cuando ya era novia de mi padre, mi madre sufrió la pérdida de su madre, que murió con menos de 50 años de edad. Me contó mi hermana los detalles que le había contado mi madre y yo no conocía. Según sé, estaba muy enferma en su cama como en otras ocasiones y llamó a mi madre. Le dijo siéntate a mi lado y después le pidió "dame un abrazo, que me siento muy mal" mientras las lágrimas brotaban en sus ojos.
Así de esta manera, abrazada por su hija Luz, es que Estrella se apaga para siempre.

No sabemos a ciencia cierta que le ocurrió, pero sospechamos que seguramente algún problema cardíaco fue el responsable.


Al menos en los recuerdos que tengo de mi madre, ella siempre fue una persona feliz aunque las condiciones de vida fuesen duras. Tenía un refrán para cada situación y una canción para cada momento. Siempre sumando mentalmente todo lo que iba comprando, a veces me sorprendía como le decía al almacenero "revisa esa cuenta que me parece que está mal" y en efecto, mal estaba.
En otros tiempos y otros lugares hubiese podido estudiar lo que hubiese querido.
Pero el pasado no le dio oportunidades.

Solo se complicaron sus últimos años de vida, donde un párkinson le jugó la mala pasada de impedirle que hablara, a ella que hablaba con las piedras del camino... y mas adelante fue responsable del deterioro que le llevó a su fin.

Al menos mi hermana la cuidó con gran esmero, ya que yo no podía ayudar por estar cuidando a mi esposa.

Hoy solo tengo recuerdos hermosos de ella y su amplia sonrisa. Y cuando converso con mi hermana la volvemos a la vida en esos bellos fragmentos que recordamos de aquellos tiempos lejanos.

Y nuestra vida es en parte las vidas de nuestros ancestros.

Nos leemos :)

La imagen fue obtenida de este sitio que enlazo aqui.

viernes, 18 de octubre de 2013

Mañana brillante y tarde gris - 293

Hoy por la mañana, con gran alegría, con la que siempre recibo tus mensajes, me llegó esta pequeña parcela de sentimientos:


Si quieres quererme
Voy a dejarme querer
Si quieres odiarme
No me tengas piedad...

No suelo hacer promesas por que odio no cumplirlas. Será que me han prometido sin cumplir y me aleccionaron al respecto. No se si lo que te diré será una excepción, pero ahí va de todos modos:
Primero que nada vale que confiese algo.
Estoy haciendo trampa desde hace mucho tiempo, por que te vengo queriendo sin tu permiso ;-)
Es una debilidad mía, disculpa, pero es así.
Me halaga que tu reciprocidad, y cuando leí tus palabras mi cabeza quedó dando vueltas, y me entendimiento nulo por un buen rato :)
El problema es que no sabría odiarte, así que difícilmente sería impío.
Es justo que te diga algo al respecto, por que tus palabras han hecho brillar mi mañana y me hicieron saltar a la estratosfera de alegría, pero ha llegado esta tarde gris.

Hoy caminaba hacia mi casa y vi a una señora que me pareció muy agradable caminando delante de mi. Me di cuenta enseguida por qué me pareció agradable: se parecía a ti.
De inmediato pensé qué ocurriría si en realidad fueses tú.
¿ Señora, podría darme un abrazo ? Sería un posible abordaje desde atrás ;-)
¿ Hola, eres tú ? Sería algo mas impaciente y menos elaborado...
No dudo del momento mágico que sería encontrarte en persona. Sería grandioso !!
Pero no dejo de pensar en lo siguiente. Tu eres libre y yo soy un esclavo.
Mi esclavitud es algo que por ahora me condena. Soy esclavo de mis principios y ellos me quitan la libertad.
Para lograr el cambio que deseo, la libertad, tendría que ir en contra de mis principios y dejar de ser quien soy.
Solo el devenir puede cambiar la situación, y no mi persona.
Se que hay opiniones contrarias al respecto, pero te aseguro que en mi caso están equivocadas.

Se que te he dado mucha ilusión, misma que yo tengo y eleva mi existencia casi al infinito. Soy feliz teniéndote, aún de esta manera. Pero la felicidad no es completa.
No quiero que tu dejes de ser feliz solo por mi. Eres un ser muy especial para  mi, y puede que en tu camino te cruces con otras personas, que te gusten, pero libres. Si es así solo me lo dices y nada mas. No perderás mi amistad y yo no prometo dejar de amarte.
Lo que no puedo pretender es que te ates a mi como a un lastre, por que eso podría hacerte infeliz, que es todo lo contrario a mis deseos.

Dejé expuesta mi opinión, sin pretender con ella restar nada de tu felicidad. Mi única pretensión es, al contrario, no hipotecarla.

Te quiero desde hace tiempo.

Nos leemos.


martes, 15 de octubre de 2013

Aplauso al sol que se oculta! - 294

Pues eso, que la palabra ocaso me suena un poco a algo diferente, que no por eso he de dejar de usar esta hermosa palabra, pero que no la voy a usar en este momento en particular.

El país donde vivo, Uruguay, tiene bastantes kilómetros de costa que dan hacia el sur en forma genérica, pero con todas las puntas que penetran en el Río de la Plata o en el Océano Atlántico mas hacia el este, se generan en los meses de buen clima donde puede disfrutarse la costa, lugares especiales desde donde se puede ver, cuando no hay muchas nubes en el horizonte, unos gloriosos atardeceres donde el sol se pone detrás de la línea recta del horizonte que nos da el mar contra el fondo del cielo. Es justo decir que el Río de la Plata no es un verdadero río, sino mas bien un estuario muy ancho que no deja ver el territorio de la otra orilla, así que la diferencia con el mar es ínfima a veces.

Los días claros y templados son fielmente elegidos por multitud de personas, que seleccionan un lugar y se acomodan como quien toma asiento en las butacas de una sala de teatro.
Ya sea una rambla cubierta de pasto, un muro o solo unas rocas, lo importante es la vista desde el lugar hacia el mar o el río.

Como en todo espectáculo, tenemos espectadores ocasionales y también de los otros, que conocen la obra de memoria, pero no dejan de verla una vez mas.
No hay edad para esta función. He visto parejas mostrando a su bebé el horizonte, así como ancianos y toda edad posible entre el nacimiento y el ocaso de una vida.

Pero lo que mas me llama la atención es un detalle.
Es muy popular la costumbre de aplaudir al finalizar una obra de teatro para regocijo de los actores y encargados de la producción, pero aquí aplaudimos el momento exacto en que bajo un silencio expectante y a una velocidad en aparente crecimiento, se oculta el sol tras el horizonte hasta que se desvanece el último de sus rayos de luz, quedando solamente el resplandor reinando en la atmósfera.

En realidad dije que aplaudimos aunque no es mi costumbre. Considero que en este caso el silencio que continúa durante la puesta en escena es crucial para la obra antes y después del desenlace, le da un tinte adicional, agudiza la percepción y por lo tanto hace mas disfrutable el acontecimiento.
Coincido con las parejas que toman la ocasión para un fuerte abrazo o un beso apasionado, mientras se contemplan ellos mismos bajo esa luz amarillenta y moribunda, como quien está a la luz de las velas, bajo las estrellas nacientes.

Aplaudimos a unos actores que no aprendieron el libreto y a una producción que no siempre nos limpia el cielo como queremos.
Quizá como regalo algún rayo verde u otro fenómeno exótico corone de excepción el espectáculo, pero la mayoría de la gente sigue aplaudiendo, no se a qué.
Puede que la explicación esté en la religiosidad del espectador, que a pasar de saber que observamos cuerpos celestes en movimiento, atribuyen a un ser supremo la obra y le aplauden en agradecimiento.

Nunca he juntado tanto entusiasmo infantil como para aplaudir, y sin embargo mis nervios se estremecen con el espectáculo, con la grandeza del universo que se manifiesta cada día en algo tan simple.
Prefiero compartir esa sensación mas íntimamente con la persona que quiero.
Sentir el roce de su piel junto a la brisa del mar, su respiración, el latir del corazón.

Hace poco me ha llegado un mensaje que decía, con amor y cierto ánimo travieso, "No se tú, pero yo no quiero perderte" y en letra mucho mas pequeña "amanecer a tu lado". Sin dudas un gran deseo, algo exquisito. Yo tampoco quiero perderte.
Y por algún motivo me hizo recordar que tras un amanecer hay también un anochecer para disfrutar.

Especialmente de a dos.


Nota:   He tomado libremente imágenes de la red por que no parecen tener derechos de autor. De estar equivocado no dudaré en ponerme en contacto con los dueños de las imágenes para seguir con sus directivas acerca de su uso en este blog.


miércoles, 9 de octubre de 2013

No te detendré - 295

En el mismo tópico de la libertad y el amor, escribí estas pocas líneas.
Fueron escritas pensando en alguien muy especial, que me ha dedicado sus silencios, y que no sé si alguna vez conoceré personalmente. He descubierto que este gran inconveniente no evita el que me apasione por ella, y me queme por dentro. No puedo ofrecer disculpas a nadie, por que los hechos son de esta manera. Tampoco sé si esta eternidad durará un segundo, como la define el conejo de Alicia en el País de las Maravillas. Todo es muy loco, y yo también.

Lo publico aquí por que se que nadie mas que yo lo podrá borrar, jeje.
Bueno, siempre están los terremotos y otras yerbas, pero tengamos un poco de esperanza en que de esta forma al menos alguien tome nota si es que a alguna persona le gusta la idea detrás del cuadro de letras que es este pequeño poema.



No te detendré

Te quiero como eres tú,
No te quiero ver cambiar.
Si me das todo de ti,
¿Que quedará en tu lugar?
Te diluirás en el tiempo,
Tus metas no vas a lograr.

Si me das tu hermosa mirada,
Nada mas podrás ya ver.
Si me prestas tus sentidos,
¿Te quedarás sin mas sentir?
Una parte de tu vida sí quiero ser,
Ser importante en ella también.

No quiero ser el todo de ti,
No quiero el dueño tuyo ser.
Quiero compartir, no poseer.
Que no cambiamos si crecemos,
Que doblegar no es vencer,
Que esclavizar no es amar.




Nota:   He tomado libremente imágenes de la red por que no parecen tener derechos de autor. De estar equivocado no dudaré en ponerme en contacto con los dueños de las imágenes para seguir con sus directivas acerca de su uso en este blog.

martes, 8 de octubre de 2013

Dejemos que vuele. - 296

Llegué a donde estabas y te dije:
¿Cómo estás Alba? Venga un abrazo!
Me diste el abrazo y no fue un abrazo cualquiera. Duró un poco más, estaba más apretado.
Pasó de ser un abrazo normal a ser un abrazo mas profundo, y el silencio que lo acompañó dijo más que mil palabras.
Me miraste aún sin soltarme y por instinto acomodé unos cabellos que cubrían tus ojos, aunque no quise que aquel gesto fuese interpretado como  una  caricia, que no lo era, y me puse un poco nervioso al respecto. Siempre fuiste mi amiga, y además eres la novia de mi buen amigo Pedro, y no se juega con estas cosas. Te tomé del brazo que tenías en mi cintura y nos miramos en silencio, de frente.
¿Quieres que vayamos a otro lado a hablar?
Me diste un sí, con la mirada y un leve movimiento de la cabeza. Salgamos dije entonces.

Ibas caminando a mi lado sin expresar gestos ni emitir palabras.
¿Es por Pedro? ¿Qué está pasando? Te aviso que no sé nada, y solo pasé por que estaba cerca... y ahí me interrumpiste rompiendo el silencio con una voz trémula y esos ojos vidriosos que parecían querer estallar:
- Necesito que me ayudes. Está enojado conmigo ¡y nunca lo había visto de esa manera!
- ¿Y se puede saber qué pasó? No tengo problema en ayudar a mis amigos, pero parce que estoy aún muy por fuera de todo. Además piensa un poco: yo soy el que no tiene experiencia en nada, del que las mujeres huyen...
- Es tu amigo, y yo te conozco de hace mucho. Es muy simple, le dije que quería ser madre joven y le cambió la cara! No quiere ser padre, dice que tiene muchos planes, que no puede ser y se fue... y ya pasan tres días que no lo veo y no quiere hablarme!
- Ahh, ufff... Me dejas sin palabras y no se qué decir. Nada de lo que pienso tiene sentido.
Dime, por favor no te ofendas pero ¿No eres demasiado joven y él también? Nadie se va morir si esperan unos años... Pero qué digo, si aún no están viviendo juntos, solo...
- Mi madre. Ella se va a morir. En no mas de un año según los doctores.
- Deja que me siente. Todo me daba vueltas. No podía comprender como esa hermosa mujer, tu mamá, podía estar así de mal. Teresa siempre me quiso como un amigo de su hija, siempre con gran simpatía, siempre tan amable...
- ¿Qué tiene Teresa?
- ¡No importa lo que tiene! y finalmente las lágrimas rodaron por tus mejillas, mientras me tomaste de la mano y me dijiste:
No hay nada mas que hacer que lo que quiero, que es llevar a la realidad su fantasía de ser abuela. ¡No sabes cómo lo desea! y yo soy su única hija. Mi padre no dejó ni rastro de su existencia, así que está sola conmigo...
- Le has dicho todo a Pedro.
- Si.
- (largo silencio, una mirada y un suspiro mío) Puedo ha_blar con él (mierda, no me salen las palabras y quiero llorar yo también)
Al final tuve que llorar y fuiste tú quien secó mis mejillas. Solo me miraste un rato. Qué feo espectáculo estaba dando...
- Se fuerte por favor.
- No te preocupes, soy del "sexo fuerte" (¿para qué digo tonterías, si es mejor callar?)
Te llamo mas tarde por teléfono, ¿Está bién?
- Bien, me dijiste con una tenue sonrisa.

....
Iba yo caminando por la calle hacia la casa de Pedro, y aún no sabía qué le iba a decir. Pedro siempre fue un buen amigo, pero no era fácil ponerme en su lugar. Poco antes de estos hechos he tenido muchos pensamientos en que francamente le envidiaba sobre todo por haber conquistado tu corazón, Alba, por lo bien que hacía todo lo que se proponía, pero ahora todo ese brillo de oro en su vida había perdido su color.
Quedamos en que llamara a su puerta y saldríamos a caminar un rato, y así fue. Vi a su padre y me dijo ¿No sabes qué le pasa a Pedro? Es que lo veo triste y no sale casi de su habitación...
- Vamos a pasear un rato...
Hola Pedro!!
- Hola ¿Vamos?
- Vamos. Hasta luego Ignacio, nos vemos
Caminamos un largo trecho sin dirigirnos la palabra. Cuando hablé con él por teléfono le dije que quería que habláramos un rato de algo importante, y no dije dada mas, pero creo que no había nada mas que decir.
Tomé coraje y le pregunté:
¿Qué vas a hacer con Alba?
- ¿Qué voy a hacer de mi vida? Esa es la pregunta ¿No?....
- Bueno, si, con esa pregunta vamos bien...
- Pues no sé la respuesta. ¡No sé si quiero saberla!
Yo quiero a Alba, pero me pide demasiado. ¡No estoy listo!
- ¿Prefieres perder a esa buena chica?
- ¡Tú no eres el que va a quedar sin futuro! ¡Y la calle está llena de buenas chicas!
- Perdón, no fui claro. No quiero decirte qué hacer y lo que hagas estará bien para mi. Tú eres mi amigo. Solo quiero que vayas y hables con ella.
- Es que si voy estoy seguro que me convence... No Sé... No te prometo nada!
- No busco promesas. Solo me interesa que aclaren la situación los dos. Ambos son mis amigos. ¿Eh?
- Si, tú eres un amigo siempre. No estoy enojado contigo ni con ella. Es que todo esto es mucho y muy junto... No se cómo te ha metido Alba en este lío. Voy a tener que hablar con ella.
¿Y dime, te has metido con la morocha de los apartamentos, esa que dijiste que te ponía mal de solo mirarla?
- (Quedé absorto con la última pregunta pero más aún con la anterior respuesta, no atiné a contestar bien...) Ehh no sé, no se digna a mirarme, me parece que me ignora por completo...
- Mal, muy mal, ¡tienes que insistir! ¿Cuándo te vas a quitar esa timidez?
- Já,, nunca...
- De veras, jajaja!
...............

Solo recuerdo del casamiento civil, que no admitieron mi firma como testigo por que era menor de edad. Tú y Pedro tuvieron que presentar permisos de sus padres.
Por suerte todos apoyaron tu aventura con Pedro, y hoy día la recuerdan con cariño en el lejano pasado.
Ya disfrutas de tus nietos y aún siguen siendo una pareja. Raro por estos días.
 _____________

Y esa es parte de la historia de mi vida.
De joven siempre me sentí atraído por las mujeres que no eran para mi.

Salud, y nos leemos :)